La hipertensión es un problema cardiovascular común que afecta a hombres y mujeres. Sin embargo, si no se trata, puede amenazar la vida. Por esto, es vital mantener la presión sanguínea bajo control ya que cuando envejeces, se hace más difícil de tratar. Los resultados de un estudio reciente publicado en los Archivos de la Medicina Interna que incluyeron a 2000 adultos mayores padeciendo hipertensión confirmaron esto.
Para comenzar, la hipertensión afecta negativamente la función de tus arterias, riñones y todo el organismo. Cuando no se trata adecuadamente, puede resultar en una falla de los riñones, infartos, u otros problemas fatales. La hipertensión generalmente se trata con terapias agresivas.
Sin embargo, el mismo tipo de tratamiento no se le puede aplicar a todos, ya que la medicina para la hipertensión es diferente para personas de 50 o de 18 años, debido a que las personas de grupos de edades diferentes responden de manera diferente al tratamiento.
¿Cómo se diagnostica la hipertensión?
Cuando un paciente se diagnostica con hipertensión, los doctores toman en cuenta todo. Incluyendo edad, estilo de vida, dieta, factores genéticos, y la historia completa del problema de hipertensión. Es importante que se comience a tratar de detectar desde los 20 años. La Asociación Americana del Corazón aconseja que incluso los jóvenes sean evaluados por hipertensión en sus evaluaciones médicas rutinarias, al menos cada dos años. Esto aplica sobre todo para jóvenes cuya presión sanguínea sea mayor de 120/80 mm Hg.
La presión sanguínea varía cada minuto, dependiendo de la postura, el nivel de estrés, el sueño, y la actividad física. Para ser más específico, en el intervalo entre los latidos, el corazón descansa y la presión sanguínea baja. Por otra parte, cuando tu corazón late, la presión de la sangre se eleva. Para los adultos de 20 años o más, la presión sanguínea normal es menor a 120/80 mm Hg, es decir, menos que 120 la sistólica y menos que 80 la diastólica. Por desgracia, un tercio de los adultos norteamericanos sufren de hipertensión.
Cuando la presión sanguínea del paciente se incrementa en comparación a los valores de referencia, el doctor la mide más frecuentemente. También se recomienda que los pacientes verifiquen su presión sanguínea en casa, antes de que se diagostique un problema de hipertensión.
Por tener una presión sanguínea alta una vez no significa que alguien sufra de hipertensión. Pero si se mantiene mayor que 140/90 mm Hg, que significa 140 o más sistólica y 90 o más diastólica, es muy importante comenzar con un tratamiento.
El tratamiento generalmente incluye cambios de dieta y estilo de vida, y hasta medicamentos de prescripción para pacientes con presión sanguínea mayor a 140/90.
Si la presión sistólica de un paciente es de 180 mm Hg o más y la diastólica de 110 mm Hg o más, deberían descansar unos minutos y medirse la presión otra vez. Si sigue igual, deberían visitar un doctor de inmediato.
Por tener una presión sanguínea normal, es decir, dentro de los valores normales, no significa que no debas cuidar de tu salud, porque una dieta poco saludable y la falta de actividad física fácilmente pueden provocar esta peligrosa enfermedad.