Basta de guardar silencio. Es necesario entender tu cuerpo y sus necesidades por completo. ¿Cómo esperas ser feliz y saludable sin saber esto? Hablemos de sexo.
La motivación para llegar a la intimidad con alguien más puede ocurrir desinteresadamente (quiero hacerte sentir bien), de manera egoísta (necesito aumentar mi autoestima), por aburrimiento (no tenía más nada que hacer), afecto (te amo tanto), intoxicación (no recuerdo nada de anoche), curiosidad (quería saber cómo se sentía), determinación (ya es hora de ampliar nuestra familia), venganza (quería enseñarle una lección), y por muchas más razones.
Sin importar la razón que impulse tu deseo sexual, los beneficios de tener sexo son universales y sorprendentemente (o no) muy esenciales.
Además de la «hormona del amor» oxitocina, y mejorar tu lazo con tu pareja (eso es una gran suposición), veamos de qué otra manera puede ayudarte un poco (o mucho) de afecto en tu bienestar.
#1
El sexo reduce el estrés y la ansiedad.
El hipocampo es la parte de tu cerebro responsable por la memoria, aprendizaje y emociones. El estrés es una emoción, lo cual significa que tu hipocampo debe encenderse cuando tu alma cansada quiere combatir el estrés.
Según estudios, la actividad sexual estimula el crecimiento celular en el hipocampo. Esto motiva a tu cerebro a superar el estrés, resultando en un estado de ánimo más feliz y relajado.
Al incrementar la duración de la actividad sexual, la ansiedad inicial que trae el sexo se reduce también.
Otro estudio también señala los beneficios del sexo para regular la presión sanguínea y por lo tanto el estrés.
Eso significa que estarás más tranquilo en la oficina, dormirás mejor de noche, y tendrás una actitud de «no me importa» cuando tu perro muerda el control remoto.
#2
El sexo incrementa la fertilidad.
Para aquellos lectores que quieran un equipo de futbol con su ADN, estas son excelentes noticias.
Sí, es obvio, mientras mas sexo tienes, es más probable la concepción (matemática muy básica). Pero no es solo por la probabilidad.
La calidad del esperma se reduce cuando el ADN está dañado. Según un estudio australiano, el sexo (hasta el punto de la eyaculación) todos los días por una semana mejoró la calidad del esperma al reducir el daño en el ADN en el esperma. 81% de los hombres exhibieron una reducción del 12% en el daño al ADN del esperma. Espermatozoides menos dañados y más robustos mejorar naturalmente las probabilidades de la concepción (una fertilidad incrementada para tanto el hombre como la mujer). Por lo tanto se le recomienda las parejas que quieren tener un bebé, tener sexo a diario antes de la ovulación.
#3
El sexo reduce el dolor.
El acto sexual puede ser divertido.
Eso solo puede ayudarte a olvidar esa molestia artrítica en las rodillas o ese moretón en el hombro. Pero los efectos analgésicos del acto sexual son mucho más que solo diversión.
Si te han hecho cirugía, o has visto el programa de televisión Dr. House, quizá conozcas bien el término morfina. Para aquellos que no lo conozcan, es un analgésico. El cuerpo produce internamente analgésicos similares a la morfina llamados endorfinas.
Incrementan el aguante del dolor al reducir tu sensibilidad al dolor. El acto sexual incrementa los niveles de oxitocina (la hormona del amor) lo cual permite la liberación de endorfinas. Probablemente es la manera del cuerpo de asegurar que la estimulación sexual siga siendo disfrutable y no se haga desagradable. ¡Una ventaja tras otra! Más endorfinas se traduce como: ¿Dolor? ¿cuál dolor?
#4
El sexo incrementa la inmunidad.
La inmunoglobulina A (IgA) es el anticuerpo (célula defensora) más dominante producido en mucosas de todo el cuerpo. Más IgA significa una mejor inmunidad. Además, el IgA salivar ha probado ser directamente proporcional al IgA vaginal (ya explicaremos por qué resaltamos esto).
Según un estudio con 112 estudiantes universitarios, los individuos que participaron en actividades sexuales una o dos veces por semana exhibieron mayores niveles IgA salivares que los individuos que no tuvieron sexo o tuvieron demasiado sexo (más de 2 veces por semana). Además de una mejor inmunidad (te enfermarás menos y podrás estar en todas esas citas que tienes programadas), más IgA salivar significa también más IgA en las mucosas vaginales.
Esto reduce la susceptibilidad a las enfermedades de transmisión sexual. ¿Ves la conexión ahora?
#5
El sexo reduce los riesgos cardiovasculares.
Un grupo de investigadores demostró que la frecuencia de los orgasmos es inversamente proporcional a la tasa de mortalidad. ¿Muy difícil de comprender?
Mil hombres de mediana edad fueron monitoreados por 10 años. Los que tenían más sexo vivieron por más tiempo, con una tasa de mortalidad reducida en un 50%. Además tenían un corazón más fuerte según lo observado por su riesgo reducido de enfermedades coronarias.
La actividad sexual protege tu salud cardiovascular y tu deseo de hacerte viejo junto a tu pareja.
Así que se recomienda tener sexo al menos 2 o 3 veces por semana.
