5 cosas horribles que tienes que sentir para finalmente superar tu divorcio

Siempre hemos escuchado sobre los cinco estadios del duelo por los que pasa una persona cuando pierde a un ser amado. Pero, ¿sabías que también aparecen estos cinco estadios después de un divorcio?

Cuando pasas por un divorcio es como una muerte del amor. Incluso si tú eres quien inició el divorcio, sigue siendo un duelo. Esto se debe a que no sólo estás de luto por la muerte de tu matrimonio.

También estás afligido por la pérdida de tus esperanzas y sueños. La creencia de lo que pensabas que iba a ser tu vida.

Quiero enfatizar que cada persona atravesará las cinco etapas de la aflicción de forma distinta y no existe un lapso determinado para cada una. La meta final el llegar al quinto estadio: la aceptación.

Algunos expertos concuerdan en que lleva un año por cada diez años de matrimonio superarlo. Esto es bastante tiempo. Muchas cosas pueden suceder en un año. De cualquier forma, puede tomarte más o menos tiempo dependiendo de diversos factores. Incluyendo quién inició el divorcio, qué tan feliz eras en tu matrimonio y tu nivel personas de confianza y bienestar.

Durante tu proceso de duelo, sentirás frecuentemente los efectos particulares de un divorcio. Aquí te compartimos un resumen de los cinco estadios del duelo asociados al divorcio:

  1. No puedes aceptar que verdaderamente se acabó

Lo creas o no, el estado de negación inicia durante el matrimonio. Puede ser difícil creer o aceptar el hecho de que tu matrimonio se terminó. Te aferras a un jirón de esperanza de que las cosas pueden ser diferentes y que cambiarán. Consideras que existe la posibilidad de recuperar la magia que existió en su relación.

La negación es normal. Es una manera de ayudarte a soportar la situación sin emociones abrumadoras. Es una manera de esconderte de los hecho para poder lidiar con el dolor.

Otras formas de negación incluyen no creer que la otra persona realmente quiere dejar el matrimonio. No creer que está enamorada de alguien más. O encontrar difícil de creer que realmente te está sucediendo a ti. Después de todo, nunca anticipas que te encontrarás en una situación así.

  1. Todo lo que tenga que ver con tu ex te hace enojar

Durante y después de tu divorcio, puedes experimentar enojo direccionado en una gran variedad de formas. Dependiendo de la situación que finalmente desembocó en divorcio.

Por ejemplo. Puedes estar enojado con tu ex por engañarte. Puedes estar enojado con su jefe por hacerle trabajar demasiadas horas. Puedes estar enojado de que usara alcohol o drogas. O de que no le importara lo bastante como para hacer que las cosas funcionaran. Puedes estar enojado contigo mismo por no ver lo que estaba escrito en la pared. Por soportar malos tratos mucho tiempo, o por no mostrar el amor y el respeto que la otra persona necesitaba.

La ira también puede aparecer por la manera en la que la pareja trató a los hijos. O porque no les llama o los visita. Incluso puede parecer que ya no le importan. Puedes enojarte por que la persona no paga los gastos de nos niños a tiempo o por que te deja en un desorden financiero. Cualquiera que sea la razón, vas a sentir enojo.

  1. Con frecuencia piensas “si tan sólo yo hubiera”

La etapa de negociación va más allá de tratar de encontrar maneras para ganar de vuelta a la persona. El estado de negociación es el que te encuentras pensando “si tan solo  yo hubiera” y “qué pasaría sí”.

En esencia, estás intentando cambiar el pasado o la presente realidad a través de tus pensamientos. De alguna manera, negociar es tratar de racionalizar lo que sucedió. Piensas “si tan solo lo hubiera visto venir”, o “si lo hubiera intentado más duro”, o “si sólo hubiéramos ido a terapia”. Estás intentando arreglar lo que ya sucedió.

La negociación también se presenta en forma de venganza hacia tu ex, y su posible nuevo o nueva amante. Esperas que tu ex sufra lo mismo que tú. Tal vez pienses “quiero que sea tan miserable como soy yo” o “me gustaría pasarle encima con un autobús. No te asustes, esto  también  es normal.

  1. Quieres enterrarte en vida debajo de las cobijas durante meses

Las posibilidades apuntan a que atravieses un estado de depresión. Sin comer, alimentarte o dormir adecuadamente. Las noches están llenas de pesadillas y sueños de lo que pudo ser o de que terminarás sólo y debajo de un puente.

Durante el estado de depresión, probablemente sentirás una profunda tristeza por la pérdida de tu matrimonio. Puedes sentirte herido de que sus votos no significaran tanto para tu cónyuge como para ti. Puedes llorar por el hecho de que él o ella no resultó ser la persona que tú creías que era. Puedes derramar toneladas de lágrimas por tus hijos. Así mismo, durante esta etapa, puedes jugar el rol de víctima etiquetando a tu expareja como narcisista, sociópata o compulsivo. Todo con tal de superar el dolor.

Puedes encontrarte deprimido por que perdiste tu casa y debiste mudarte con amigos o familiares. O por que necesitas encontrar un nuevo trabajo para mantenerte. La sola idea de que ahora estás por tu cuenta puede ser muy aterradora. Este miedo abrumador puede hacerte ir de regreso a los estadios anteriores.

  1. Finalmente, estás listo para hacer una nueva vida

La aceptación viene cuando aceptas enteramente el hecho de que tu matrimonio, así como tus sueños y esperanzas de un futuro juntos, se terminaron. Es en este punto en el que estás listo para comenzar a construir una nueva vida para ti. Aceptar es dejar ir el pasado.

Incluso después de aceptar el divorcio, puede que sigas encontrándote a ti mismo lidiando con enojo, culpa o miedo. De cualquier manera, estas emociones se irán haciendo menos intensas conforme pasa el tiempo. Para la mayoría de las personas, esto significa sentir un poco de indiferencia por tu ex pareja y por cualquier cosa que ella esté haciendo.  Has separado tu vida personal de ella. Si tienen hijos juntos, aprenden a hacerse cargo de ellos de manera respetuosa y sin pelear.

Eres como los cimientos de una casa. Pueden soportar el fuego, así como las tormentas más severas. El matrimonio se construye en la cima de estos cimientos. Si el matrimonio se derrumba y las paredes se vienen abajo, es lógico que pases por una etapa de duelo.  Pero cuando das un paso atrás y lo miras con objetividad, estás listo para comenzar de nuevo y construir una vida llena de felicidad para ti mismo.

!Comparte este reflexivo artículo con todo tus amigos!

MIRA ESTOS ENLACES: 

Lo Que Verdaderamente Significa Ser Tú Mismo Y 3 Formas de Lograrlo

Cómo Detectar Si Tuviste Una Infancia Con Padres Tóxicos

21 Tips Para Liberar La Autonegación Y Amarte A Ti Mismo

DEJA UNA RESPUESTA

Please enter your comment!
Please enter your name here

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.