El maíz es el granos de mayor producción en el mundo, y la mejor cosecha de América (Casi 80 millones de hectáreas). Sin saberlo, las personas comen maíz todos los días de alguna manera u otra más de lo que se imagina. ¿Sabías que el maíz no es un vegetal? El maíz es un grano y uno muy malo. De hecho, tiene el peor radio de omega 3 a omega 6 de todos los granos. Omega 3 produce hormonas que son antiinflamatorias. Omega 3 producen hormonas que apoyan la inflamación. Cuando el omega 6 supera en número al omega 3, ellos irrumpen la habilidad del cuerpo para controlar la respuesta inflamatoria. Esta inflamación puede resultar en muchos problemas de salud como enfermedades inmunes, diabetes, cáncer, incremento en el colesterol, asma, enfermedad cardiovascular y depresión
Según el Dr. Sanjay Gupta
“Somos como hojuelas de maíz caminantes porque tenemos una muy, muy grande fracción de maíz en nuestras dietas y no podemos evitarlo porque es un aditivo en muchas de las comidas que conseguimos en los anaqueles del mercado.
Comidas como la salsa de tomate, aderezo de ensalada, sodas, galletas y papas fritas, todas contienen maíz y usualmente jarabe de maíz de alto contenido en fructosa.
“Pienso que el peligro que viene junto al maíz es que muchos de los cultivos de maíz en norte América se usan para hacer Jarabe de maíz de alto contenido en fructosa”, dice Dawson. “Así que no el maíz no es malo como tal, pero es el edulcorante hecho a base de maíz que se usa para muchas comidas que los americanos probablemente consumen en grandes cantidades, y que vemos ahora resaltar en casos de obesidad, enfermedades de corazón y potencialmente diabetes tipo 2”
Seis razones para nunca volver a comer Maíz
El maíz no es un vegetal!
El maíz es un grano poco saludable ya que es el grano más dulce, almidonado y vacío que hay. El maíz fue domesticado y cultiva por humanos hace más de 6000 años en México central proveniente de una planta conocida como teosinte. El maíz fue el primer alimento modificado genéticamente y continúa siendo rediseñado en maneras jamás imaginadas.
El maíz puede activar una enfermedad autoinmune
Aunque el maíz no contiene gluten, puede ser bastante irritante para la pared intestinal. Esto ocurre porque tu cuerpo piensa que las proteínas en el maíz son gluten por lo que puede entorpecer tu sistema inmunológico. Adicionalmente, el maíz tiene un alto índice glicémico, lo que significa que se convierte fácilmente en azúcar en el cuerpo lo que puede causar una respuesta de insulina y puede contribuir a la inflamación.
El maíz no puede ser digerido
Según Health.com, los humanos no podemos digerir completamente el maíz porque contiene la fibra celulosa. El sistema digestivo humano no puede descomponer totalmente la celulosa porque le hace falta la enzima para poder hacerlo, llevando problemas a personas que usualmente consumen maíz
Como todos los granos, el maíz contiene prolaminas, las cuales son una clase de proteína que tu cuerpo no puede descomponer apropiadamente, por lo que lleva a problemas como un intestino goteante.
El maíz contiene lectinas
Las lectinas son proteínas que no podemos digerir. Nosotros normalmente digerimos proteínas hacia los aminoácidos donde son absorbidas por los intestinos delgados y usados por nuestro cuerpo para desarrollar estructura celular y componentes. Sin embargo, ya que no podemos digerir lectinas, ellas pasan por la pared intestinal sin digerirse completamente como proteínas. Esto daña el intestino y causa inflamación.
El maíz de hoy en día está lleno de pesticidas
La mayoría del maíz vendido hoy en día no es orgánico, lo que significa que está llenos del insecticida BT (bacillus thuringiensis) y otros venenos dañinos.
Un estudio en el 2011 en Canadá, descubrió que la toxina BT se acumula en la sangre humana. Una vez en el sistema sanguíneo, la toxina BT puede irrumpir la función apropiada de los órganos y causar problemas de salud a largo plazo.
85% del maíz está modificado genéticamente
Desafortunadamente, una parte de ese 85% de todo el maíz cultivado en América está modificado genéticamente. En un estudio publicado recientemente en el Diario Internacional de Ciencias Biológicas, analizando los efectos de los alimentos modificados genéticamente en la salud mamífera, los investigadores descubrieron que el maíz del gigante agricultural Monsanto’s GM está vinculado a daño en los órganos en ratas