La cúrcuma es considerada la cura natural para toda clase de problemas de salud comunes. También se recomienda como alternativa a farmacéuticos y otros medicamentos ya que es una sustancia natural y produce menos efectos secundarios. Aunque muchos de estos puntos son válidos, esto lleva a que muchas personas subestimen los efectos que tiene la cúrcuma en el cuerpo humano. La investigación ha demostrado que la cúrcuma puede causar efectos secundarios serios si se toma en dosis altas o en combinación con otras drogas.
Cuando la gente habla de “cúrcuma” normalmente se refieren a la raíz molida de la planta de cúrcuma. El uso de la cúrcuma viene de la India desde hace casi 4000 años, cuando era utilizada como especia culinaria y también como medicina en situaciones ceremoniales. Aunque muchos de sus presuntos beneficios aún no tienen un respaldo científico, la cúrcuma ha demostrado científicamente tener una amplia gama de beneficios para la salud. La mayoría de los beneficios a la salud vienen del ingrediente activo que contiene llamado curcumina.
A través de estudios rigurosos realizados en la curcumina, los investigadores han descubierto que exhibe efectos antiinflamatorios, antioxidantes, anticarcinogénicos y antitrombóticos (reducen coágulos sanguíneos).
Como resultado de estas propiedades beneficiosas, la gente utiliza la cúrcuma como alternativa o en combinación con otras drogas para tratar ciertos problemas de salud. Muchas veces lo hacen para evitar las complicaciones o efectos secundarios traídos por el consumo de altas dosis de drogas farmacéuticas. Sin embargo, las mismas propiedades que hacen la cúrcuma tan beneficiosa también la hacen peligrosa en combinación con otras drogas, ya que puede producir efectos secundarios desfavorables y nocivos.
Efectos secundarios de la cúrcuma
Muchos de los componentes que hacen tan beneficioso a la cúrcuma son los mismos que la hacen nociva en combinación con ciertas medicinas. Por ejemplo, su propiedad antitrombótica, que la hace reducir los coágulos sanguíneos, la hace peligrosa en combinación con medicación que diluya la sangre. Tomar cúrcuma con estos tipos de medicación puede pronunciar sus efectos e incrementar el riesgo de sangrado. Algunos medicamentos que diluyen la sangre son: warfarina, clopidogrel y aspirina.
La cúrcuma también interfiere con drogas que reducen la acidez estomacal. Si se toma junto con estas, puede más bien incrementar la producción de ácido gástrico del cuerpo. Esto puede causar náuseas, inflamación y dolor estomacal y además puede hacerle daño a tu esófago. Algunos fármacos que reducen la acidez estomacal son: cimetidina, famotidina, ranitidina y omeprazol.
La cúrcuma también puede ser peligrosa al combinarla con medicamentos para la diabetes (que bajen el nivel de azúcar). Intensifica los efectos de estas drogas, incrementando el riesgo de hipoglucemia. Esto puede producir otros efectos como: debilidad, temblores, ansiedad, visión nublada, delirio y en general una función cognitiva reducida.
También puede causar reacciones alérgicas en algunas personas, como erupciones e irritaciones en la piel, falta de aire para respirar y anafilaxis. Si tomas algún medicamento o padeces alguna reacción alérgica cuando tomes cúrcuma, se recomienda reducir la cantidad, o buscar otra alternativa natural.
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