Todos han visto Noche Estrellada, la pieza de arte característica de Vincent Van Gogh. El remolino de estrellas y la luna creciente activan en nuestra imaginación algo que no todo el arte puede hacer.
Los orígenes de la pintura están emocionalmente cargados y son un poco tristes,
Después de cortar un pedazo de su propia oreja durante un episodio psicótico, Van Gogh ingresó por su cuenta al Asilo Psiquiátrico Saint Paul de Mausole en Francia.
Fue allí donde él pintó la reconocida Noche Estrellada.
Van Gogh sufría de lo que ahora se conoce como epilepsia del lóbulo temporal. Es una condición que tiene como resultado alucinaciones al igual que sentimientos maníacos de inspiración y fascinación. Su psicosis, según los historiadores, podría bien haber sido lo que inspiró sus piezas turbulentas de trabajo.
Recientemente, los científicos han descubierto algo más sobre su trabajo, particularmente durante la parte psicótica de su vida. Cuando se analizan microscópicamente las imágenes y el flujo natural de luz dentro y alrededor de las estrellas, ellos notaron que era similar a como fluye la luz en Noche Estrellada. Era impactante.
Después de un análisis detallado, los científicos descubrieron que Van Gogh, sin saberlo, perfeccionó la turbulencia de fluidos, unos de los conceptos más malentendidos en la ciencia física. Lo que es aún más interesante es que la única vez en la que su trabajo imitó la turbulencia de fluidos fue cuando él estaba en un estado psicótico.
Es una habilidad que el cerebro normal no tiene.
Al final, se cree que Van Gogh se quitó su propia vida sin tener el reconocimiento merecido por su trabajo. Él vendió solo una pintura en toda su vida. Pero su genialidad aún vive.
Lo de los fluidos es sorprendente, pero ya vieron que en el centro del remolino se le ve a él. Genial como lo fue el Gran Vincent Willem Van G., o igual y estoy loca. Pero me encanta