Muchos de nosotros por el esfuerzo de ahorrar energía y dinero, reemplazamos nuestros focos estándar por las de nueva generación de focos ecológicos ahorradoras. Sin embargo, esa nueva generación de focos son tan tóxicas que la Agencia de Protección del Ambiente estadounidense creó un protocolo de emergencia que debes seguir en el caso de que se te rompa una, debido al gas venenoso que emiten. Si se rompen en interiores, las bombillas emiten una concentración de mercurio 20 veces mayor a la aceptable, según un estudio conducido por investigadores del Instituto Fraunhofer Wilhelm Klauditz para la Agencia Federal de Ambiente alemana.
Los focos ecológicos pueden causar:
- Mareos
- Dolores de cabeza
- Migraña
- Convulsiones
- Agotamiento
- Dificultad para concentrarse
- Ansiedad
Los focos ecológicas causan ansiedad, migrañas, e incluso cáncer. Razones para volver a los focos incandescentes
- Los focos ahorradoras contienen mercurio. El mercurio es una neurotoxina potente que es especialmente peligrosa para niños y mujeres embarazadas. Es especialmente tóxica para el cerebro, el sistema nervioso, hígado y riñones. También puede hacerle daño al sistema cardiovascular, inmune y reproductivo. Puede causar temblores, ansiedad, insomnio, pérdida de memoria, dolores de cabeza, cáncer y Alzheimer.
- Los focos ahorradores pueden causar cáncer. Un nuevo estudio realizado por Peter Braun en el Laboratorio Alab de Berlín, Alemania, descubrió que estos focos contienen agentes venenosos carcinógenos:
- Fenol: un sólido blanco cristalino tóxico y un poco ácido, obtenido del alquitrán de hulla y usado en la manufactura química.
- Naftaleno: un compuesto cristalino blanco volátil, producido por la destilación del alquitrán de hulla, usado en las bolas de naftalina y como materia prima para la manufactura química.
- Estireno: un hidrocarburo líquido no saturado, obtenido como derivado del petróleo.
- Emiten muchos rayos ultravioleta. Emiten UV-B y trazas de radiación UV-C. Es conocido que dicha radiación es dañina para la piel (puede causar cáncer) y los ojos. La radiación de estos focos ataca directamente al sistema inmune, y daña los tejidos lo suficiente para evitar que se produzca la vitamina D3.
Así que a pesar de los ahorros en energía y costos, estos focos son un riesgo serio para la salud y tienes suficientes razones para querer volver a los focos incandescentes. Pero ten cuidado cuando lo hagas. Si rompes un, los peligros son tan severos que la Agencia de Protección Ambiental ha creado un protocolo detallado para lidiar con el mercurio y os químicos cancerígenos, que puedes leer a continuación:
Procedimiento de limpieza oficial de la Agencia de Protección Ambiental
Según la Agencia de Protección Ambiental estadounidense, se debe seguir el siguiente procedimiento en el caso de ruptura de un foco, debido a la emisión de gas resultante.
Antes de la limpieza:
- Que las demás personas y mascotas salgan de la habitación.
- Ventila la habitación por 5-10 minutos abriendo las ventanas y puertas.
- Cierra las ventanillas del sistema de acondicionamiento de aire central, si tienes uno.
Busca los materiales necesarios para recoger un foco roto:
- Papel duro o cartón
- Cinta adhesiva
- Toallas húmedas de papel o fibra
- Frasco de vidrio con tapa de metal o bolsa plástica hermética
Durante la limpieza
- NO USAR ASPIRADORA. No se recomienda el uso de aspiradoras, ya que pueden esparcir el polvo que contiene mercurio o el vapor de mercurio.
- Sé meticuloso al recoger los fragmentos de vidrio roto y cualquier polvo visible. Recoge los fragmentos de vidrio y el polvo usando papel duro o cartón. Usa cinta adhesiva para recoger cualquier fragmento de vidrio o polvo restante. Coloca la cinta usada en el mismo frasco o bolsa hermética. Ve las instrucciones de limpieza detalladas para más información, y para ver diferencias entre limpiar superficies duras o superficies porosas como alfombras.
- Coloca los materiales recogidos en un contenedor sellable.
Después de la limpieza
- Coloca todos los residuos y materiales de limpieza, incluyendo bolsas de aspiradora, afuera en un contenedor de basura o un área protegida hasta que los materiales puedan ser desechados. Evita dejar cualquier residuo dentro de tu casa.
- A continuación, investiga si tu gobierno local tiene requisitos de desechos en tu área, porque algunas localidades requieren que los focos fluorescentes sean llevadas a un centro de reciclaje local. Si no hay requerimientos como estos en tu área, puedes colocar los desechos con el resto de la basura.
- Si te es práctico, sigue ventilando la habitación donde se rompió el foco y deja apagado el sistema de acondicionamiento de aire o calentamiento por varias horas.
Parece que les faltó decir que usen guantes y cubrebocas al limpiar restos