El polvo de bebé se encuentra en muchos hogares. No es sólo para la parte inferior de un bebé; muchas mujeres lo utilizan para ayudar a mantener su piel suave y joven. Sin embargo, lo que mucha gente no sabe es que el talco en polvo para bebés lo han relacionado como una causa de cáncer en ovario.
A pesar de que aún no se ha clasificado como cancerígeno, el Dr. Cramer estima que el talco para bebés y el talco para cuerpo son responsables de miles de casos de cáncer de ovario cada año en los EE.UU.
Una asociación entre el talco, específicamente, el uso en la zona genital de la mujer el ovario de cáncer genital ha sido encontrado por múltiples estudios, incluyendo uno publicado en 2008. Ese estudio encontró que las mujeres que usan talco al día podrían tener un 41% de mayor riesgo para el cáncer de ovario.
Aunque algunos estudios no han encontrado ninguna relación entre el talco con el cáncer de ovario, el Dr. Cramer sugiere que esto realmente tiene que ver con la duración del estudio que uno lleva.
«El principal problema es que la mayoría de los estudios no muestran una denominada dosis,» dice el Dr. Cramer. «Es decir, cuanto más tiempo se usa el talco y cuantas más veces se lo aplica, mayor es el riesgo.»
Historia verdadera:
Una mujer de Dakota del Sur, Deane Berg, que desarrollo cáncer de ovario antes de la menopausia después de los 30 años de uso después de ducharse se aplicaba talco, presentó una demanda contra Johnson & Johnson (J & J), alegando que no advirtió a los consumidores sobre su talco y los peligros de cáncer en ovarios.
Ella fue diagnosticada con cáncer de ovario mucho antes de la menopausia. Esto es extraño teniendo en cuenta que sólo el 25% de las mujeres diagnosticadas con cáncer de ovario están en la premenopausia. Ella tampoco tiene ningún antecedente familiar de esta enfermedad.
Cuando el Dr. Cramer realizó pruebas, los resultados fueron claros.
«Hemos calculado que ella había tenido más de 8.000 aplicaciones de talco. Las pruebas mostraron que el talco se encontraba en sus ovarios, endometrio y sus ganglios linfáticos «, añade.
«Se podía ver como a ella se le sonrojan los ojos cuando escucha esta desgarradora información durante el juicio,» dice el Dr. Cramer. «Aquí estaba este talco en sus ganglios linfáticos. Había estado allí para siempre. Ella no tenía idea de que esto estaba pasando, y ella estaba claramente molesta».
Ella ganó su caso.
En la actualidad existe una demanda activa frente a Johnson & Johnson por su incapacidad para advertir a las mujeres de los posibles peligros de cáncer de ovario asociado con el uso de talco continuo.
