Las amistades son cruciales para conformar nuestras vidas. Hallar a alguien con quien disfrutas pasar tu tiempo, sin una pizca de romance, te puede llevar a nuevas experiencias y a sentirte comprendido. Un verdadero amigo te respalda durante cualquier crisis, te sostiene la mano en la tragedia y celebra contigo tus logros.
Sin embargo, en una amistad se pueden generar las mismas tensiones y presiones que en cualquier otra relación de tu vida y se puede deteriorar con el tiempo. La diferencia entre las amistades y otras relaciones es que puede resultar particularmente difícil identificar una amistad tóxica.
Es importante que identifiques si estás inmerso en una amistad tóxica y que, de ser así, la dejes ir en pos de tu bienestar emocional. Revisa estos 3 signos que son indicios de que estás en una amistad tóxica (que debería terminar):
Tu amigo/Te causa vergüenza
Sentirse avergonzado a propósito es una cosa, pero cuando el comportamiento genuino de tu amigo te hace sentir vergüenza ajena cuando están juntos en público, es una clara señal de que la relación se ha vuelto tóxica. La vergüenza es un signo evidente de que tus actitudes y comportamientos han cambiado y madurado. Tener un amigo que no está preparado para dejar atrás quienes eran en el pasado es una señal de que permanecer cercanos ya no es beneficioso para ninguno de ustedes.
Tu amigo/no se lleva bien con tus otros amigos, familia o pareja
Si tu amigo no quiere compartirte con nadie más, definitivamente estás en una amistad tóxica. Estos celos triviales que habitualmente se manifiestan en comentarios y comportamientos groseros, son un claro indicador de que la amistad se ha vuelto una relación de dependencia en lugar de ser un vínculo de respeto mutuo.
Pasar tiempo con alguien así altera tu visión del mundo convirtiéndola en una mucho más sombría, ya que tu “amigo” intenta crear una mentalidad de ‘nosotros contra el mundo’. Esto deja muy poco lugar para que cualquiera de ustedes pueda crecer o abrirse a nuevas experiencias.
Tu amigo/nunca te apoya
En el centro de una amistad verdadera está el apoyo. Un amigo de verdad celebra lo bueno que sucede en tu vida y se compadece de lo malo. Tus amigos son quienes se quedan contigo incluso en las pruebas más desgarradoras. Más importante aún, cuando las cosas van bien o estás considerando tomar un riesgo, a veces necesitas personas que se unan en torno a ti y te digan lo grandioso que eres. Un amigo tóxico hará lo opuesto a todas estas cosas: tus logros conseguirán un comentario desagradable de su parte, o te recordará tus defectos e inseguridades en un intento por debilitar tu autoestima.
Una relación de amistad debe ser siempre una fuente de amor y consuelo en tu vida. Como expresó C. S. Lewis “la amistad es innecesaria como la filosofía, como el arte… No tiene un valor de supervivencia; más bien, la amistad es una de aquellas cosas que le otorgan valor a la supervivencia”.
¿Alguna vez has estado en una amistad tóxica?