La energía nuclear ha sido considerada durante mucho tiempo como una gran forma de generar poder para iluminar y calentar nuestros hogares. Puede producir electricidad sin necesidad de liberar ningún tipo de gases invernadero.
De cualquier manera, después de algunos desastres terribles en plantas nucleares en el mundo, las personas se han hecho más conscientes de que, además de ser una gran fuente de energía, los materiales utilizados para extraer energía nuclear pueden ser muy peligrosos para toda la humanidad, si no se tratan con cuidado.
Existen muchas preocupaciones sobra la salud y el bienestar de las personas que viven cerca de una planta nuclear o que trabajan en ella. Diversas medidas de seguridad se toman en la manipulación de los combustibles nucleares, pero muchas veces éstos no se desechan de la manera adecuada y contaminan con radiación el suelo y la tierra, intoxicando así a miles de personas.
La humanidad está muy cerca de sofocar la atmósfera con dióxido de carbono. Por eso, las plantas nucleares que no producen emisiones se consideran una gran alternativa para conseguir energía limpia. Y en realidad lo son, pero también deben de considerarse otro tipo de riesgos.
La disposición de residuos nucleares, también llamada manejo de desechos radioactivos, es una parte importante del proceso de generar energía nuclear y existen algunas normas muy estrictas que hay que acatar para realizarlo de manera segura para las personas y para el ambiente.
Por suerte, la cantidad de desechos radioactivos que genera una planta de poder nuclear es muy pequeña, si la comparamos con la cantidad de polución y desechos que producen otras formas de obtener energía, principalmente la quema de combustibles fósiles. Quemar carbón, por ejemplo, contamina mucho más. Pero el potencial dañino de los residuos nucleares mal manejados también puede ser muy grande.
Lee también:
Peligros del manejo de desechos radioactivos
Normalmente, los residuos nucleares que se van a desechar primero se almacenan en contenedores hechos de acero, que entonces se colocan en cilindros de concreto. Estas capas protectoras previenen que la radiación salga al exterior y dañe el ambiente que los rodea. Es una manera relativamente fácil y económica de contener materiales que pueden ser muy tóxicos y no necesitan una transportación ni almacenaje especial. Sin embargo, existe cierto número de inconvenientes que acompañan a este tipo de eliminación de desechos nucleares.
1.- Radioactividad
Los productos que deja la fisión nuclear tienen una vida media muy larga, lo que significa que continuarán siendo radioactivos, y por tanto dañinos, por muchos cientos de años. En consecuencia, si algo le sucediera al cilindro de contención en el que los desechos nucleares están almacenados, el material interno podría ser excesivamente volátil y peligroso durante siglos.
Como los residuos nucleares peligrosos generalmente no se envían a ningún sitio especial para ser almacenados, es relativamente fácil encontrarlos. El problema es que alguien puede darles un mal uso: desde personas irresponsables hasta organizaciones terroristas.
2.- Almacenamiento
Otro de los problemas con los desperdicios radioactivos que hoy en día sigue siendo objeto de acalorada discusión, es el tema del almacenamiento. A lo largo de la historia de la energía nuclear se ha debatido acerca de los distintos métodos para almacenarlos, pero muy pocos se han implementado por la naturaleza problemática de almacenar un material que es tan dañino, que permanece radioactivo por cientos de años. Como ejemplo, se ha sugerido la posibilidad de enterrar los desechos a mucha profundidad, no sólo en la tierra sino en el océano y en bloques de hielo gigantescos; e incluso se ha sugerido lanzarlos al espacio exterior.
De todas estas ideas, sólo una se ha llevado a cabo. Por desgracia la más riesgosa: treinta países diferentes ocuparon el océano para deshacerse de sus desechos radioactivos. Por suerte, esta práctica ya no se implementa más. Sin embargo, la cantidad de desechos radioactivos que ya se tiró al mar puede comenzar a afectar terriblemente la vida marina en cualquier momento.
3.- Daño a la naturaleza
Una de las grandes preocupaciones con respecto al manejo de residuos nucleares es el efecto que su radioactividad puede tener en la fauna y la flora colindante. Aunque la mayoría de las veces los desechos están bien sellados en sus contenedores de acero y de concreto, algunas veces suceden accidentes y pueden aparecer filtraciones.
El desecho nuclear tiene un efecto particularmente malo en la vida, ya que causa enfermedades en el sistema inmunológico, cáncer y mutaciones hereditarias que pueden acompañar a las especies y a los humanos por muchas generaciones. Un derrame de material de desecho nuclear que pase desapercibido el tiempo suficiente, puede tener un impacto colosal en toda la vida que lo rodea, incluso llegar a niveles que no podemos imaginar.
Efectos del manejo de residuos nucleares
Si las plantas nucleares hacen adecuadamente el trabajo del manejo de desechos, éstos no tienen por qué tener un impacto negativo en el ambiente. No suena tan difícil dejar que el material de desecho radioactivo descanse en paz en algún lugar inaccesible durante cientos de años hasta que ya no emita radiación alguna. Sin embargo, si esto no sucede al pie de la letra y se almacenan mal u ocurre algún accidente o imprevisto, puede haber serias consecuencias.
1.- Accidentes
Aunque hoy en día los desechos nucleares se manejan con el mayor cuidado, los accidentes ocurren. Eso sin mencionar las grandes cantidades de desechos que fueron lanzados al mar irresponsablemente en el pasado y cuyos contenedores podrían estar a punto de llegar a su límite, corroerse del todo y liberar en el agua todos esos materiales tóxicos.
La historia muestra una serie de desafortunados ejemplos que nos indican cuáles pueden ser las consecuencias cuando los desechos nucleares entran en contacto con el ambiente. Ha llegado a suceder que en una tormenta grandes cantidades de polvo radioactivo se han esparcido en zonas pobladas por seres humanos. Se han contaminado grandes fuentes de agua, lagos y ríos. Estos accidentes ponen en riesgo no sólo la vida de los animales y de las personas, también de las generaciones que todavía no nacen.
Beber agua contaminada con radioactividad es absolutamente desastroso para los residentes cerca del epicentro de un derrame. Aunque el desecho nuclear esté enterrado en el suelo, eventualmente puede haber una filtración que le ayude a llegar hasta los cuerpos de agua potable y, de allí, llegar a todas las personas que la consumen. Muchas personas que viven cerca de una planta nuclear y han tenido contacto con la radiación han tenido problemas como cáncer y malformaciones en sus hijos.
2.- Saqueo
Por si fuera poco, con las probabilidades existentes de que un depósito de residuos nucleares no cumpla bien su función, existe otro problema particularmente malo que ocurre sobre todo en naciones en desarrollo. Nos referimos al saqueo de residuos nucleares abandonados que continúan siendo radioactivos. En algunos países existe un mercado negro para estos materiales, lo cual significa que mucha gente se pone en peligro exponiéndose a ellos. Los altos niveles de radiación que esta gente recibe son mucho más graves de lo que cree, pues no genera efectos de manera inmediata. Al menos no con síntomas visibles.
Normalmente, las personas que se dedican al saqueo de este tipo de materiales terminan en el hospital y luego mueren de problemas relacionados o causados directamente por la radioactividad. Por desgracia, una vez que una persona ha estado expuesta sin protección a los residuos nucleares, puede exponer a otras personas que no tienen nada que ver y causarles daño. Sobre todo si comienzan a llevar desechos nucleares consigo.
3.- Transportación
A veces, transportar los residuos nucleares de las plantas de energía genera algunos problemas. Si se utilizan malos métodos de embalaje para los contenedores de material radioactivo, por ejemplo un mal golpe o incluso una irregularidad en la superficie en combinación con un movimiento brusco, pueden causar que el contenedor entero se agriete o se rompa violentamente, esparciendo residuos radioactivos en derredor. Aunque los residuos radioactivos se transportan con mucho cuidado, de vez en cuando los accidentes siguen ocurriendo.
4.- Efectos en la salud
Las mayores preocupaciones en torno a los residuos nucleares son los efectos desastrosos que pueden tener en la salud de las personas. La radiación es capaz de llegar hasta el ADN del cuerpo humano y destruirlo, lo que causa cáncer, malformaciones y mutaciones. Las células ya no pueden repararse a sí mismas y la persona, junto con su descendencia, debe enfrentar terribles anormalidades de por vida.
5.- Costo
Cuando uno de estos accidentes ocurre, el costo de limpiar el área (cuando se puede, que no es siempre) es verdaderamente muy elevado, pues se requiere equipo especializado y existe un alto costo en el pago de sueldos y seguros para los trabajadores que se exponen a los residuos. Además, puede tomar años asegurarse de que una zona ya no tiene desechos tóxicos y no es peligrosa para las personas y para los animales.
¡Comparte esta importante información con todas las personas que conozcas!
¡Sigue leyendo nuestros artículos para enterarte más sobre contaminación!:
- Contaminación Térmica: Causas Y Consecuencias
- Contaminación Del Suelo: Causas, Consecuencias Y Soluciones
- Contaminación Del Aire: Causas Y Efectos