Jack Lalane fue un pionero en el mundo de Fitness. ¿Sabes que todos los gimnasios que puedes ver hoy en día por toda la ciudad, son el mismo concepto que inauguró en 1936?. Muchas de las máquinas que puedes usar en los gimnasios, de hecho, las inventó él. Incluso, todos esos programas y vídeos con rutinas de ejercicios, tienen su origen en la idea que él tuvo de hacer llegar hasta la comodidad de tu casa estos contenidos. Su show de salud estuvo durante 34 años al aire. Y es el programa de esta temática que más transmisiones ha tenido hasta hoy. Impresionante ¿No?
Y esa es sólo su carrera empresarial.
Si realmente quieres quedar anonadado, deberías echar un vistazo a su archivo de personal de logros.
Aquí sólo algunos de los que realizó:
- Nadó desde Alcatraz a la bahía de los pescadores en San Francisco… usando unas esposas.
- A los 42 años, rompió el récord nacional de lagartijas, logrando hacer 1,000 en tan sólo 23 minutos.
- Con 45 años, hizo 1,000 saltos y 1,000 levantamientos en sólo 22 minutos.
- A los 60 años, realizó de nuevo la travesía de Alcatraz a San Francisco, pero esta vez le agregó, además de las esposas, el remolque de un bote de media tonelada.
LaLane contaba con una condición física tan envidiable, que podría hacer lagartijas sólo con los dedos de una mano.
¿Listo para algo verdaderamente increíble?
Para celebrar su cumpleaños número 70, LaLane nadó 1.5 millas desde la Costa de California hasta el Puente del Camino de la Reina en Long Beach. Y lo hizo mientras usaba esposas, grilletes en sus manos y piernas, y remolcando 70 botes con 70 personas en ellos. Suena imposible, pero aquí está la foto de LaLane, de 70 años, nadando con todos los botes tras él.
¿Qué hacía que este hombre tan ejemplar fuera distinto?
De cierta manera, los logros de LaLane son tan extraordinarios que es difícil identificarnos con ellos, y menos aún, aplicarlos como modelo a seguir de nuestra vida diaria. Lo que quiero decir es que, aunque me encantan los retos de Fitness, no tengo intenciones de nadar más de un kilómetro remolcando 70 personas.
Afortunadamente, sí hay una lección que todos podemos aprender de Jack LaLane, y que de hecho aplica a casi todo en tu vida. No lo encontrarás mirando sus impresionantes logros, si no examinando sus hábitos diarios.
La rutina diaria de Jack LaLane
«La única manera en la que puedes lastimar a tu cuerpo, es no usándolo»
-Jack LaLane.
Aquí hay algunos de los hábitos que siguió LaLane al pie de la letra por décadas:
- Levantó peso y realizó estiramientos diarios por 90 minutos.
- Adicionalmente, nadaba o corría 30 minutos extra.
- Comía 10 vegetales crudos.
- Tomaba dos alimentos. Un desayuno tardío y una cena temprana.
- Despertaba a las 4 de la mañana. En sus últimos años, se daba el «lujo» de dormir hasta las 5 am.
Cuando miramos esta lista, nos damos cuenta de que realmente no es tan larga. Pero imagina tener estos hábitos de manera inamovible durante 60 años, como lo hizo Jack LaLane.
Incluso a la edad de 94 años, LaLane seguía ejercitándose por al menos dos horas diarias. 90 minutos de estiramientos y peso. 30 minutos de cardio. 10 vegetales crudos. Todo, durante 60 años sin parar.
Cuando vemos que alguien alcanza objetivos tan sorprendentes, tendemos a achacárselos a alguna facilidad genética o natural, como si no estuviera al alcance de todos lograr tales proezas. Sin embargo LaLane demostró que todo se trata de disciplina y que cualquier persona que verdaderamente se fije una meta, la puede cumplir a base de dedicación y de empeño. La verdad es que las personas más increíbles, incluso aquellas que logran metas inimaginables, son sólo personas comunes y corrientes. Pero con más consciencia que el resto.
Fue su increíble consistencia y disciplina las que llevaron a este hombre así de lejos.
Cuando miras la vida de LaLand, es fácil fijarse más en sus logros y en los récords que logró romper, que en su hábitos diarios. Pese a que fueron éstos los que le permitieron llegar a donde llegó. Pasa algo similar cuando miramos nuestra propia vida. Nos concentramos en las grandes metas y descuidamos los buenos hábitos del día con día. Queremos cambios rápidos y sin esfuerzo, y olvidamos que los cambios importantes implican dedicación y tiempo.
El éxito en cualquier ramo tiene que ver con cambios en el estilo de vida. No con golpes de suerte. Es tu rutina diaria la que va a llevarte eventualmente a cualquier sitio al que quieras llegar.
Si algo es importante para ti, organiza una rutina con horario
¿Cómo hizo Jack LaLane para apegarse a sus hábitos de manera diaria por 60 años? ¿crees que sólo esperaba a sentirse motivado para comer sus verduras crudas o hacer sus dos horas de ejercicio?. No. Su consistencia tenía muy poco que ver con la motivación o la fuerza de voluntad. nadie despierta motivado sesenta años seguidos.
Pero LaLane sabía lo que era importante para él, y por eso hizo una rutina diaria para cada día de su vida. Iniciaba cada día con ejercicios de estiramiento. Entonces iba a nadar y a caminar. Entonces tomaba su desayuno. En el mismo orden, cada vez, cada día. Si examinas la vida de este hombre, verás que cada actividad tenía un momento determinado y una razón de ser. ¿Podrías decir lo mismo sobre tu propia vida?. Seguramente muchos de nosotros no. Y allí está el truco para lograr tus objetivos.
Con gran frecuencia, nos decimos a nosotros mismos cosas como «voy a comer más saludablemente», o «voy a hacer más ejercicio»: Pero realmente muy pocas veces nos decimos cuándo y cómo van a ocurrir estas cosas. Despeja algo de tiempo. Despeja un día. Elige un horario. Dale a tus acciones un lugar en el tiempo y el espacio para que se puedan materializar en tu vida.
LaLane no dependía de su fuerza de voluntad ni de su motivación. El sólo se apegaba a su rutina diaria.
Lecciones de Jack Lalane: Mantén tu vida en perspectiva
En sus últimos años, LaLane solía decir «no puedo permitirme morir, algo así arruinaría mi imagen». Eventualmente, como todos, murió a la edad de 96 años. Y en todos estos años, considero que uno de sus más grandes logros fue aferrarse a su felicidad tanto como lo hizo a su salud. Incluso son sus enormes metas alcanzadas, LaLane no persiguió durante su vida ningún otro objetivo que el de ser feliz. El balance entre los logros personales y la felicidad tal vez sea algo en lo cual no pensamos tan a menudo. Sin embargo, no existe ninguna razón para que no ames la vida que tienes con todas tus fuerzas, y eso incluye la parte de cumplir objetivos y ser mejor cada día.
Aunque no es fácil. La felicidad y la gratitud requieren un trabajo constante. Tanto como hacer dieta y ejercitarse. Tu felicidad y tu salud conforman la base de la vida que tienes. No existe nada nuevo o complejo acerca de esto. No importa lo que los anuncios de productos para la salud, programas de acondicionamiento y suplementos alimenticios no quieran hacer creer.
LaLane nos enseñó que puedes hacer cosas increíbles y maravillosas, y al mismo tiempo, disfrutar el camino mientras las consigues.
Aprendiendo de Jack LaLane
LaLane vivió una vida increíble. Y perfeccionó un arte que todos nosotros podemos aprender. La de apegarnos a una rutina.
¿existe acaso alguna habilidad más útil que la de trabajar de manera consistente para lograr nuestras metas, manteniendo al mismo tiempo un sentido de la felicidad y la perspectiva?
No son tus logros, si no tus hábitos diarios los que hacen la verdadera diferencia. Los que determinan lo que eres y a lo que estás verdaderamente comprometido. Maneja bien tus hábitos diarios, y habrás conseguido todo lo demás. Si podemos aprender de la vida de este hombre, no cabe duda de que nuestras propias vidas mejorarán increíblemente.
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