Una de las primeras cosas que se nos ocurre cuando queremos crear el espíritu navideño en casa es incorporar un árbol de Navidad vivo. Estos árboles huelen muy bien y son una excelente manera de albergar el espíritu festivo. Después de todo, ¿a quién no le gusta un árbol de Navidad?
Pero antes de reunirte en torno al árbol para abrir los regalos recuerda que tu árbol (si está vivo) pasó mucho tiempo creciendo al aire libre, y hay una multitud de bichos que podrían estar llamándolo su hogar. Sin embargo, no temas, la vida silvestre que viene junto con tu árbol de Navidad no es peligrosa y no supone un riesgo para tu hogar ni para tu salud. Solo que puede que no quieras invitarlos a tu fiesta navideña.
Áfidos o pulgones: huéspedes frecuentes de tu árbol de Navidad vivo
Un insecto que probablemente vas a encontrar en un árbol de Navidad es el pulgón, una criatura de seis patas que puede medir un octavo de pulgada. Generalmente, no tienen alas y permanecen en el árbol durante toda su vida, pero si ellos logran producir descendientes puede presentarse una variedad alada. Desafortunadamente, cuando llevas el árbol al interior de tu casa, esto simula las condiciones de primavera y su ciclo vital entra en acción. Por esta razón, tú podrías estar tratando con una multitud de crías en santiamén.
La clase más común de áfido es el Cinara y se encuentra mayormente en pinos, píceas, abeto balsámico (también llamado abeto de Navidad), Abies fraseri, y abeto del Colorado. Son huéspedes específicos que solo pueden sobrevivir alimentándose de ciertas plantas, en este caso, de tu árbol.
Ácaros: los infiltrados en tu árbol
Muchas especies de ácaros pueden vivir en tu árbol de Navidad e infiltrarse en tu casa. Comúnmente, los ácaros habitan en los árboles de las siguientes especies: abeto de Douglas, pino blanco, Abies fraseri y píceas. Ellos hibernan como adultos y se vuelven activos cuando son expuestos al calor de tu hogar. Habitualmente, permanecen en el árbol donde se alimentan de insectos y huevos de ácaro. Son tan pequeños que pasarán desapercibidos, pero son diminutos y de colores claros (si los estás buscando). Existe un tipo de ácaro que es bastante más grande y de color rojo brillante; son familiares de las niguas, pero en el estado adulto son inofensivos.
Si tu árbol viene como un nido de ave viejo en él, deberías quitarlo antes de ingresarlo a tu hogar porque existen algunas especies de parásitos de aves que podrían terminar tomando un aventón.
Arañas: las encargadas de mantener bajo control la población de insectos de tu árbol
Las arañas actúan como depredadoras de los insectos que ya se encuentran en tu árbol y no son peligrosas para los humanos. Pueden resultar espeluznantes, pero en realidad mantendrán la población de bichos de tu árbol bajo control. Si tienes arañas en tu árbol, son especies que hibernan o crías de araña que eclosionan cuando toman contacto con el calor de tu casa. Sin embargo, estas arañas son para estar al aire libre y con frecuencia morirán al poco tiempo de ser introducidas en el interior.
La peor cosa que podría suceder a causa de las arañas en tu hogar sería que ellas hilen algunas telarañas, las cuales se quitan fácilmente con una aspiradora o un cepillo.
Mantener los insectos fuera de tu hogar
Existen algunas medidas preventivas que deberías tomar si no quieres que los insectos invadan tu hogar durante las fiestas. Primero, examina las ramas y el tronco de tu árbol, asegurándote de que no hay sacos de huevos visibles u otras infestaciones. Segundo, deja que tu árbol permanezca en tu cochera durante al menos un día, entonces los insectos tienen la oportunidad de desalojar el árbol. Tercero, sacude vigorosamente el árbol antes de llevarlo al interior. Y, finalmente, puedes rociar aceite de nim sobre tu árbol para matar los insectos remanentes, pero nunca debes rociar insecticidas porque son inflamables.
¿Y tú cómo controlas la población de insectos en tu árbol de Navidad vivo?